miércoles, 17 de julio de 2013

Todo para poder enterrar a su hija Yanira Fraire Jáquez, de 15 años: y descubre que le dan parte de un hueso de otra desaparecida


Parte I: 31 de mayo

Limpiar más casas, en silencio: para enterrar a su hija. Necesita 10 mil pesos (unos 800 dólares) para la funeraria Perches y 907 (72 dólares) para el panteón San Rafael. Se niega a aceptar la ayuda que ofrece el Estado de Chihuahua a las víctimas de feminicidio: "prefiero pagarlo porque no confío en ellos".
Le muestran los huesos de su pequeña Yanira Fraire Jáquez, que desapareció a los 15 años de edad. También, su ropa. Para acordarse, los escribe en una hojita: el cráneo, las costillas, la mayor parte de los huesos, el 75 por ciento del esqueleto.

Parte II: 17 de julio 

Me tardé para juntar el dinero. La que depende todavía de mí está en la universidad y la chiquita, en la preparatoria. Llamé a la hija que vive en Estados Unidos y vino para ayudarme. El martes liquidé todo.

Me trajeron el ataúd a la funeraria hacia las 2 de la tarde, cuando tenía la misa (funeral) a las 12 del mediodía. Supuestamente la carroza se descompuso. No me lo creí y por eso me puse peor porque yo sabía que a las tres y media de la tarde cerraban el panteón. 

A las 2,20pm lo abrí, le dije al que llevaba a la carroza, ayúdame a abrirlo porque lo voy abrir.
Estaba harta con tantas cosas que yo veía. Me decía que no podía abrirlo hasta que llegara salubridad. A mí me vale! si yo estoy pagando, no el gobierno. Le dije al de la funeraria que me prestara unas tijeras. Me metí para abrirlo yo y mi hija, y el chavo que llevaba la carroza.

En el que él rompió, levanté la tapadera. ¿y esto qué es?, le dije.  Es lo que le pertenece, me contestó. Pues no. Dentro del féretro, había una caja de cartón y estaba teipeada con tape (cinta adhesiva) canela. Ha bía un sobre amarillo vacío y una bolsita de plástico con un pedacito de hueso de cuatro centímetros  y era lo único.


Parte III: 18 de julio 

A las 7 de la mañana me habla Mari García (la mamá de Jessica Leticia Peña, que fue enterrada hace   un año y cinco meses. Me  dice que ella no sabía que era lo mío, que ella lo tenía desde el sábado, que Norma Ledesma -de la organización Justicia para Nuestras Hijas- se lo había confirmado. Tenía la urna con las cenizas en un altar, le había puesto velas. Ella pensaba que era el hueso de cuatro centímetros que había pedido incinerar, pero pesaba un kilo.

El Fiscal Jáuregui me pide perdón, que fue un error de la funeraria. Y lo único que le pregunté es quién dio la orden. El abogado de la funeraria me dijo que todos cometemos errores, que somos humanos... No les creo. Yo cómo puedo asegurarme si los de la Funeraria trabajan para la Fiscalía, yo no lo sabía.

Metí un abogado. No sé con cuántas mamás habrán jugado. Me armo de valor y voy a hacer lo que es correcto, no voy a pelear algo injusto. Voy a demandar a quién sea responsable. Y ahora, en el caso que se encontrara el asesino de mi hija, cómo lo voy a inculpar, sino tengo nada, si me quedé sin pruebas de nada. A mí me dijeron que no se podía incinerar a mi hija, que era un delito, porque era feminicidio y necesitaban las pruebas, y ahora me dan cenizas.

Parte IV: 19 de julio

Ahora sí me pusieron peor, porque no estoy segura que esas cenizas sean las de mi hija. Yo no les creo, porque si me quisieron engañar con eso, y yo sé que esto es irremediable.

La urna es blanca, con un rosalito de color plata. Se la entregó en la tarde del viernes el abogado de la funeraria. Está en una repisa, con una foto de Yanira Fraire Jáquez: que desapareció a los nueve meses de celebrar su quinceañera.

Yanira quería ser médico pediatra. Le fascinaba ayudar. Y entre la que tengo en la universidad, iban a tener un orfelinato para llevar a los niños y ayudarles. Tenía muy bonitos pensamientos. Desapareció el 16 de junio del 2010. Yo estaba trabajando, limpiando una casa y ella se ofreció a ir a Bancomer, en la calle 16 de septiembre y la Avenida Juárez (zona centro), para pagar la colegiatura para la preparatoria. Tomó el camión a las once y media de la mañana. Claro que la pagó, 1.400 pesos ( unos 112 dólares), porque yo saqué un comprobante y vi el vídeo del banco.



Nació hace 45 años en Santa Clara, Durango. Cuando tenía 15 años, emigró a Ciudad Juárez en busca de trabajo en una fábrica maquiladora, pero no tenía la edad requerida y comenzó a limpiar casas. Mari Jáquez tiene cinco hijas, una de ellas víctima de feminicidio, arrojada en el Arroyo del Navajo, en el Valle de Juárez: Yanira Fraire.

Yo pensaba que las desaparecidas se iban a bailar, que andaban de noche, nunca me imaginé que fuera de día cuando se pierde una niña. Como sólo los primeros días dan la nota, pensé que luego ya las encontraban. Nunca pensé que me iba a pasar esto.  Las mamás deben de ser bien listas y astutas. Es un monstruo el que anda.

sábado, 13 de julio de 2013

Sin noticias, desde hace dos años: Nancy Navarro. Desaparecida

En el segundo año de la desaparición de su hija Nancy Navarro, Lucy pegó pesquisas en los edificios abandonados del centro de Ciudad Juárez con la esperanza de encontrarla

No pudo dormir y pensó en un deseo: no tener qué pensar qué hacer para seguir reclamando que las autoridades la busquen y la encuentren con vida. No más estaba dormitando, reflexionando en cómo serían sus vidas si hace dos años su hija Nancy Navarro no hubiera visto un letrero en la tienda Modatelas que solicitaba empleadas. Ella también estaba ahí. Era un martes, 12 de julio de 2011, pasaditas las 5 de la tarde. Nancy, de 18 años, entró a aquel establecimiento de la calle Mina en la zona centro de Ciudad Juárez y le aplazaron para entregar su solicitud al día siguiente, el 13 de julio.
La última vez que la vio fue a las 11 de la mañana. Nancy se despidió de su niña de un año y tres meses, y tomó una ruta cerquita de su hogar en la colonia obrera Francisco I. Madero:
http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/07/desaparecida-nancy-navarro-18-anos-sin.html

Ya era tarde para soñar otro pasado en un presente de incógnitas, reflexionó Lucy sin poder descansar ni un segundo. Quizá su hija hubiera visto tarde o temprano otro letrero para encontrar un trabajo. Como otras adolescentes que han desaparecido en la vigilada zona centro de Juárez en los últimos cuatro años: en una ciudad donde las autoridades intentan enterrar la tragedia sin resolver de las desaparecidas (pobres y bellas) y víctimas de feminicidio de los últimos veinte años en su objetivo de limpiar la mala imagen (y no la realidad) de la ciudad. Pero ellas existen. Y cada año son más: con la indiferencia, la impunidad y la justicia que convierte en culpables a inocentes -los chivos expiatorios- para cerrar casos lo antes posible, cuando la presión de los familiares comienza a peligrar la burbuja de normalidad y hermetismo que se vive en Ciudad Juárez con las desaparecidas. Hasta que te toca.

"En estos dos años he aprendido que no hay justicia, que todo es pura corrupción, que nadie (de las autoridades) va a hacer nada para encontrar a nuestras hijas, que mi única esperanza es seguir manteniendo mi fe en Dios y en la comunidad que diga algo, y por parte de ellos sólo hay puro lavado de cerebro", dice Lucy, de 39 años, la mamá de Nancy Navarro, que trabaja limpiando casas.

Se levantó con el amanecer para preparar engrudo: harina batida en agua caliente. Antes pegaba las pesquisas -con la foto y los datos de su hija- con cinta adhesiva. Pero pronto se dio cuenta que las arrancaban con facilidad. Y con la necesidad descubrió un nuevo método, además, más económico.

Llega a la Catedral y se reúne con dos docenas de mamás y papás que como ella saben lo qué es tener a una hija desaparecida y pueden permitirse dejar horas de su trabajo y pagar el pésimo transporte público de la ciudad. Todos le ayudan a pegar pesquisas desde la Avenida Juárez donde se encuentra uno de los puentes fronterizos que unen Juaritos con el paraíso de seguridad que es El Paso, Texas, hasta los rincones más escondidos. Los postes se han convertido con los años en uno de los lugares más codiciados para colocar la imagen de su Nancita, hay que buscar el milímetro preciso para no tapar el rostro y los datos de otras desaparecidas. Lee la información, apunta los datos, así sabe en muchas ocasiones que una joven más ha desaparecido: hasta que las hojitas son arrancadas, desfigurándoles sus rostros en papel.
El calor, bien feo, casi 40 grados centígrados con ese sol del desierto que quema aún más en el verano.

"Pegamos por varios lugares que nosotros pensamos que pueden tener niñas, en hoteles y cantinas como el Hotel  El Refugio, el Río de Janeiro, el Verde... Se siente impresionante cuando uno llega a esos lugares. En las paredes y en los vidrios de lugares abandonados se pega muy bien".




A las siete horas de empapelar lo que queda del centro de la ciudad con la imagen de su hija mayor, Lucy regresa a su hogar, sin ninguna pista sobre el paradero de Nancy Navarro y sin haber podido comprar un burrito para comer. Tenía el dinero justo para la rutera.

"Yo creo que me siento más fuerte cuando ando con las mamás como que nos apoyamos unas a otras, pero a la vez siento coraje de tener que estar haciendo esto y qué mejor que tener a mi hija en casa. Quito tiempo a mis otros tres hijos y a mi nieta por tener que andar buscándola, ir a juntas y va pasando el tiempo y más coraje siento con las autoridades que no hacen nada... tengo que seguir echándole ganas".

**** Estas son algunas de las entradas que he escrito sobre la desaparición de Nancy Navarro, desde que me contactaron a los dos días de su desaparición, cuando aún las autoridades no habían activado el Protocolo Alba de búsqueda, que tardó diez días: tras una protesta de la familia de la joven. Por si queréis saber más sobre lo qué ocurre cuándo una hija, una mamá desaparece en Ciudad Juárez y la agonía de la espera llega, por ahora, a dos años:  

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/07/desaparecida-nancy-navarro-18-anos-sin.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/07/buscando-su-hija-nancy-navarro-de-mama.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/08/cumple-14-anos-y-busca-su-hermana-nancy.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/08/una-pista-pero-las-autoridades-no-hacen.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2012/04/brianita-cumple-dos-anos-de-edad-8.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/10/diario-de-la-espera-de-una-mama-12.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2012/11/celebra-el-cumpleanos-de-su-hija-pero.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/11/como-ser-abuelita-y-no-derrumbarse-en.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/08/como-sobrevivir-siete-semanas-con-tu.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2011/09/ella-no-podra-gritar-viva-mexico-en-la.html

http://juarezenlasombra.blogspot.com/2012/01/identificar-prendas-de-cadaveres-para.html