viernes, 30 de julio de 2010

6 meses sin ellos, o cuando el dolor y la búsqueda de justicia para Juaritos se convierte en unión y esperanza: masacre de 15 en Villas de Salvárcar














Camarones. Hubiera querido estar empanizando camarones. Ahorrar un poquito para regalarle su platillo favorito en el día de su 20 cumpleaños.
Todo menos estar ahí, durante dos semanas confeccionando margaritas blancas, rosas rojas: para todos: los 15 de la masacre de la colonia obrera Villas de Salvárcar, 13 de ellos estudiantes y deportistas.

Flores artificiales, en las manos de Luz María Dávila. Porque el dinero no da para comprar unas naturales. Y porque le mataron a su hijo Marcos Piña, un día como hoy, viernes 30 de julio, pero de hace 6 meses.

Su otro hijo, José Luis, ya cumplió en abril los 17. También en un ataúd.

Primero, conseguir el material. Después, calentarlo, ponerlo en el molde, jugar con él. En una hora, 3 flores. Va bien. Habrá arreglos florales para todos los que fueron enterrados con sus dos únicos hijos.

"Quién iba a pensar hacer flores para llevarle el día de su cumpleaños, me gustaba comprar camarones y hacérselos", me dice Luz María Dávila, la mamá huérfana de sus hijos, que está en la foto. "Ahora sólo quiero justicia y paz en Juaritos para que otros no sufran lo que estamos sufriendo".

Lejos de la casa de Luz María, vive Guadalupe Meléndez, la madre de Israel Arzate Meléndez, un chivo expiatorio: un inocente convertido en culpable de los asesinatos. Esta es la justicia histórica en Ciudad Juárez cuando surge la presión de los medios y no se quiere investigar.
"Tengo coraje, no hay justicia para los muertos y mi hijo sigue en la cárcel", dice la madre del supuesto sicario, que estuvo en contacto con las familias de Salvárcar para enviarles su pésame en este nuevo aniversario del horror, que pasa desapercibido, con los muertos del día. Hasta que te toca.

Lo que hay es dolor.

Lo que no hay es justicia: como tantos miles de asesinatos. En Ciudad Juárez.

Lo que hay ahora es unión. Movilización vecinal. Dolor convertido en esperanza y acción en una ciudad (militarizada) que se resiste a ser asesinada. Surgen los proyectos que no han hecho las autoridades: clases de primaria, secundaria y preparatoria (no hay escuela en Villas), talleres de seriografía, de defensa personal. Todo gratis. Con universitarios voluntarios, haciendo la chamba de las autoridades.
"Los vecinos han descubierto el poder de la organización", dice Julián Contreras, licenciado en Letras y organizador comunitario. "Eso les permite ir avanzando, lento pero seguro, venciendo el miedo".

Hoy, una misa en la tarde, en la misma calle donde fueron asesinados, y un poema que Patricia Dávila -la hermana de Luz María- ha escrito para los jóvenes masacrados, entre ellos, sus dos sobrinos. Después, un aplauso. Por los que no están. Antes, unas palabras:

"Y pensar que la inseguridad de nuestro país se la debemos a una sola persona llamado Gobierno. Ellos saben que nos ha fallado con sus "estrategias" y que mientras ellos viven comodamente la comunidad sigue muriéndose de hambre o por una bala la cual ellos mismos han mandado a nuetra ciudad", dice Patricia Dávila, desempleada de una fábrica maquiladora.

Aquí está el poema:

Hoy a 6 meses de esa horrible barbarie nos seguimos preguntando,
quién o quiénes fueron los responsables y no hemos tenido ninguna respuesta, sin embargo no perdemos la esperanza, de que algún día se logre hacer justicia.
Mientras tanto sigamos como hasta hoy reuniéndonos cada mes para
seguir manteniendo vivo el recuerdo de nuestros hijos.
Los cuales fueron jovenes ejemplares y sanos y ahora son
unos ángeles hermosos, que nos cuidan y nos miran desde el cielo.

Y en este día en especial, quisiera dedicar unas palabras para
Marcos Piña Dávila. Porque el día de hoy estaría cumpliendo 20 años.
Y desafortunadamente ya no lo tenemos con nosotros.

M i niño se que nos estas mirando y que no te encuentras solo.
A unque con tu partida nos rompiste el corazón hemos tratado de
R esignarnos a no tenerlos aquí a ti y a tu hermanito, y
Q uiero que sepan que siempre estarán en nuestro corazón y que
U n día no muy lejano nos volveremos a ver, y ustedes con su luz
I luminarán el camino para poder llegar a ustedes, pero mientras-
T anto tu junto con Luisito y tus amigos, dénle paz a sus padres.
O jalá que muy pronto podamos encontrar respuestas de todo lo
S ucedido, y podamos hacerles justicia como ustedes se merecen
.

El hermano de Marcos era José Luis Piña Dávila y lo van a ver ahorita en un vídeo. Otra víctima de las más de 6 mil en la llamada guerra contra el narcotráfico del presidente de México Felipe Calderón, que nada más al ser asesinados los acusó de pertenecer al crimen organizado. Sin investigar. Y tuvo que disculparse. Otros muchos van a los ataúdes con esa marca. Siendo mentira. Como si la vida de un joven pandillero, al que no se le ofreció un futuro, no valiera nada: como la de todos los pobres. En Juaritos.

El recuerdo de su novia y amigos en un vídeo:

6 comentarios:

  1. El dolor de tanta gente reunido en la doliente mirada de la señora en la fotografía. No existen palabras de consuelo. Dejemos de lado las sinrazones del caso: sólo deseo decirle la señora Luz María Dávila: sus hijos están con Dios, un día usted los volverá a ver y su dolor de hoy quedará compensado.

    De verdad: no hay más palabras.

    Antonio, desde León Gto., México.

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  2. Lo leo y no puedo evitar un nudo en la garganta, todos esos chicos asesinados y algunos incluso criminalizados por el mismo que ha tenido la culpa de su muerte y sus madres como la señora de la Foto se merecen que les hagan Justicia, que paguen los culpables de las muertes de sus hijos y tener ya una Paz asegurada y un Futuro tranquilos...el Presidente Calderón y los culpables de estas Muertes en Juaritos merecen una condena publica y otra Penal por Criminales y Cómplices de los Criminales.
    Un Abrazo a Luz María Davila y a todas las madres, padres, hermanos/as, amigos/as de los jovenes asesinados en Juaritos

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  3. Mi abrazo solidario a todas las familias, a las madres ¡¡¡¡y el deseo de Paz para Juarez!!!!

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  4. Indignante. Con mil madres en el senado como Luz María Dávila y la que increpó al presidente el día de la reunión con los padres de los niños muertos en la guardería ABC, nos iría mejor como país, estoy segura.

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  5. Judith, hoy te conocí en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL y la verdad que me motivaste mucho con tu trabajo, lo que leo en este blog me parece verdaderamente importante para darnos cuenta de la realidad que vivimos en este país, agradezco eso y que estes trabajando por C.d Juárez que forma parte de mi Estado, Chihuahua, fuiste de gran aportación hoy para mi vida y la de mis compañeros, tal vez algún día coincidamos en C.d Juárez o cualquier parte del mundo como colegas, un gran saludo!

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  6. No nos queda de otra q aprender a vivir con el dolor de aber perdido a alguien tan importante para nosotros

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