Ricardo y su esposa Olga, abrazados en la búsqueda de su hija Moni |
"Es el dolor más fuerte que se pueda tener",
Olga, mamá de Mónica Janeth Alanís Esparza: el día que su hija cumple cuatro años de desaparecida.
Van pasando los años y ellos siguen en pie. Sonríen, bromean, apoyan, sobre todo, apoyan: a las nuevas mamás y papás que convierten su dolor en propio cuando sus hijas desaparecen. Hay días en que sus sonrisas se acompañan de lágrimas en los ojos. Como hoy.
Por un segundo, pensé en escribir en este nuevo aniversario la misma historia pero con un año más: ya son cuatro, con sus días, semanas, meses que se convierten en un año, para repetirse de nuevo. De nuevo. De nuevo.
Después, me dí cuenta que ya la tenía escrita, que sólo habría que buscarla como pedacitos entre todo lo que he reportado sobre su hija Mónica Janeth Alanís Esparza y su espera, su lucha.
En este aniversario ya no está el abuelito materno de Mónica, que fue enterrado dos días antes de Navidad, la víspera en la que Moni cumpliera años. Es más duro que otros. Olga, que trabaja cuidando niños en una guardería, ha perdido en la agonía de la espera de estos cuatro años a sus padres, sin poder sentir el abrazo de consuelo de su hija: desaparecida a los 18 años de edad al salir de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), donde estudiaba Administración de Empresas y soñaba con realizar un curso académico de intercambio en España.
Quizá si las autoridades hubieran hecho su chamba para encontrarla viva, para encontrarlas vivas desde que comenzaron a desaparecer hace veinte años, estas líneas tendrían otra forma. Quizá nunca Mónica Janeth Alanís Esparza hubiera desaparecido y hoy estaría graduándose, celebrando en ser la primera en la familia en obtener estudios universitarios. Pero es la misma. La misma con otros nombres y apellidos. Con otras familias desgarradas por el dolor con la desaparición de mujeres y niñas (pobres y bellas) en Juárez. Bajo la indiferencia de las autoridades: la impunidad.
Ahora os dejo con las palabras de Olga, las que leyó en un encuentro para recordar que su hija es algo más que una estadística y exigir que las autoridades investiguen, que la desaparición de mujeres en el estado de Chihuahua sea un delito... (leyeron bien, no es un delito como lo es el robo de un vehículo, por ejemplo).
De izda. a dcha, las mamás de Griselda Murúa, Moni, Silvia Arce, el papá de Moni y la mamá de Guadalupe Pérez Montes |
En el acto, le acompañaban mamás como Evangelina, que lleva 15 años buscando a su hija Silvia Arce, o como Consuelo, la mamá de Griselda Murúa López, desaparecida a los 16 años de edad en el 2009, o las de Idalí Juache Laguna y María Guadalupe Pérez Montes que no aceptan los huesos que las autoridades locales dicen ser de sus hijas -debido a la falta de ética (y no técnica) y a la corrupción política que ha caracterizado la actuación de las autoridades hasta en la identificación de restos- y han pedido otro examen independiente de ADN. Todas saben lo que es tener una hija y no saber dónde está. Como Olga:
Ciudad Juárez, Chih, 26 de marzo de 2013
PRONUNCIAMIENTO
El 26 de marzo de 2009 nuestra hija Mónica Janeth Alanís Esparza, joven de 18 años, estudiante de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez desapareció, siendo vista por última vez dentro del Instituto de Ciencias Sociales y Administración.
Desde hace cuatro años, mi vida y la vida de mi familia dio un giro, ya que ante la desesperación de que mi hija no llegará a la casa, que hayan pasado cuatro años de su desaparición y que hasta la fecha no tengamos elementos precisos sobre su posible localización, hemos tocado muchas puertas, realizado investigación con nuestros propios recursos, seguir en la pega de pesquisas por diversos puntos de Juárez, realizar acciones de exigencia de justicia y de dar a conocer lo que pasa en Ciudad Juárez con los casos de nuestras hijas desaparecidas.
Ante el hecho de la desaparición de mi hija Mónica me encontré con:
Que la desaparición de las mujeres en el Estado de Chihuahua no es un delito, y que sólo se levanta un reporte de desaparición.
Que la investigación queda a cargo de la familia principalmente, y que necesitamos del apoyo de la gente para tener elementos que pudieran dar con el paradero de nuestra hija.
Que hay mujeres que continúan desaparecidas desde 1995. Solo este 2013 permanecen desaparecidas 20 mujeres y más de la mitad son menores de edad.
Que no existen acciones de prevención para que no sigan desapareciendo más mujeres en Juárez y en Chihuahua.
Que muchas veces existen prejuicios hacia nuestras hijas desaparecidas, donde en algunos casos le dicen a la familia que puede ser que haya ido con el novio, que tal vez usaba drogas.
Que en la ciudad existen zonas de alto riesgo señaladas desde antes, pero dónde no se realizan acciones preventivas para que no sigan desapareciendo mujeres y una de ellas que hemos señalado las familias como la mayor zona de riesgo, es el centro de la ciudad.
Que desde el 2011 se destapó que jóvenes reportadas como desaparecidas se han localizado asesinadas en años anteriores y que el procedimiento para su identificación es tortuoso, pues permanecen en calidad de desconocidas en el SEMEFO por varios meses o años, así como se le entrega a la familia un cuerpo que no se puede reconocer y que esto nos llena de más dolor y angustia.
Esto nos lleva a las Madres y Familias a unirnos y organizarnos para alzar juntas y juntos la voz desde nuestro dolor, nuestra angustia, pero también desde nuestra esperanza y fortaleza, siendo nuestro objetivo generar un espacio de unión, acompañamiento y solidaridad desde nuestra fuerza y valor para la búsqueda y localización de nuestras hijas desaparecidas y propiciar una participación en la prevención.
Y con todo esto, manifestamos que:
Hoy día solicitamos al Subprocurador de Derechos Humanos, Atención a Víctimas y Servicios a la Comunidad y a la Fiscal de FEVIMTRA de la PGR que se reanuden la revision de expedientes como parte del acuerdo que se asumió en las sesiones de la Subcomisión para Juárez y principalmente desde nuestro derecho a la verdad y la justicia.
Nos pronunciamos en solidaridad con las Madres y Familias que están solicitando una segunda opinión de Peritos Internacionales en Identificación como el Equipo Argentino de Antropología Forense.
Nos mantenemos alertas y solicitamos a la Fiscalía de Género que mantenga informadas a las familias, en tiempo breve, sobre las acciones que realizan en la investigación de la desaparición de las mujeres y en los resultados que se tengan con los restos óseos localizados en los últimos rastreos en Valle de Juárez y en la zona de Electrolux, donde desde los medios de comunicación sabemos que hay más de 66 restos óseos localizados.
Ratificamos la importancia de las tareas de prevención de desaparición de mujeres en ciudad Juárez y chihuahua, entendemos que es una tarea que debe impulsar principalmente la autoridad y de lo importante de las acciones la comunidad en coadyuvancia con las acciones preventivas.
Apreciamos y reconocemos a los grupos y organizaciones que han estado presentes en nuestra lucha.
Desde Madres Unidas ratificamos nuestra confianza en continuar haciendo trabajo para la búsqueda de nuestras hijas y que estaremos como madre y padre de Mónica Janeth aportando en fortalecer este proceso.
Cordialmente,
Sra. Olga Esparza Rodríguez y Sr. Ricardo Alanís Esparza, madre y padre de Mónica Janeth Alanis Esparza, desaparecida el 26 de marzo de 2009.
que hermoso reportaje al menos tu no haces lo que el de alcnadenares tu organisacion
ResponderEliminarme gusto gracias
ResponderEliminarMil gracias a los que además de leer mi blog os tomáis el tiempo para comentar. Y a los que me preguntan cuál es mi e mail, les ruego que me escriban de nuevo, con su dirección de correo electrónico y les contestaré. Os espero sino en mi twitter: @Judithtorrea
ResponderEliminarSaludotes y fantásticas vibrotas!
Judith
Decir que te felicito por tu trabajo, es poco. Me parece admirable lo que haces. Creo que el Universo conspirará para que sigas narrando muchas más historias, que si no fuera por ti, permanecerían sepultadas, como muchas, como la mayoría, es demasiada atrocidad para tan pocas voces que como la tuya, narra historias cotidianas. Pareciera difícil entender tanto compromiso de tu parte para una sociedad "ajena", si no fuera por tu alto sentido humano que queda manifiesto con esta obra tuya, la cual me resulta motivante, gracias. Enhorabuena. El Espíritu Infinito te proteja. Te seguiré en Twitter. Simone
ResponderEliminarMuy buen reportaje, extraño a Monica fue la única que se acerco a mi en clases y me ayudo por que yo era pésima para el ingles y ella muy buena, nos hicimos amigas y me duele que sus sueños fueron truncados y su famila destrozada y que no se haga nada.
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